Cáritas de Navarrete
El grupo de Cáritas está compuesto por doce voluntarias que en muchas ocasiones puntuales se duplican. Se trata de un proyecto presente en Navarrete desde 1985. Un grupo abierto a nuevas incorporaciones: "Desde esta página animamos a todas las personas de bien a conocernos y participar solidariamente".
Los teléfonos de contacto son el de Don Félix Oses 941440017/696252714, Doña Asunción Saenz 941 440568 y el de Doña Mª Luisa Corzana 941 440274 y su correo electrónico martas@eniac.es
Cáritas, expresión comunitaria del amor preferencial de la Iglesia por los pobres, desarrolla varios puntos:
- Función permanente. Cáritas está convocada a animar y participar el las iniciativas de solidaridad que surgen en la Iglesia y en la sociedad. Desarrolla su ministerio en nombre de la comunidad y hace visible el amor afectivo de toda la comunidad hacia los pobres.
- La animación de la comunidad y formación. Supone diversas tareas. Entre ellas hacer consciente a la comunidad del servicio a los pobres. Mantener viva la conciencia crítica sobre la situación de los pobres y promover el conocimiento de la realidad. Invitar y estimular el compromiso socio-caritativo, promover y potenciar la acción comunitaria de base, organizar Cáritas como verdadera diaconía, estimular la vivencia del espíritu de las bienaventuranzas y promover la adecuada formación en la caridad, solidaridad y la justicia mediante un proceso pedagógico permanente.
- La promoción de actuaciones coherentes y significativas. Impulsando y colaborando en iniciativas al servicio de los pobres: Que den protagonismo y eviten el proselitismo, con un talante propio y con iniciativas propias o en colaboración con la sociedad civil y las administraciones públicas.
- La coordinación de la acción socio-caritativa. Cáritas está llamada a ser "lugar de encuentro de la comunidad cristiana para un mejor servicio a los pobres". Esta coordinación debe vivir en el interior de Cáritas y con entidades eclesiales y organizaciones civiles. Supone algunas tareas de entre las que destacamos: Reconocer, animar y apoyar la diversidad de carismas y servicios, facilitar el encuentro, la colaboración y el intercambio. Y por último, vincular la acción socio-caritativa a la pastoral de cada diócesis.
- La comunicación cristiana de bienes. Es expresión de la comunidad eclesial y signo de vitalidad frente al actual modelo de sociedad consumista. Cáritas debe movilizar la comunidad en la perspectiva de compartir los bienes de todo tipo y no sólo los económicos. Esta comunicación de recursos debe crecer a todos los niveles de Cáritas y en especial con las Iglesias y pueblos más necesitados.
- La mística de Cáritas en el ser y en el obrar. Cáritas y quien vive inmerso en la acción socio-caritativa de la Iglesia, descubre a los pobres y al mundo de la pobreza como lugar privilegiado para el encuentro con Dios. La espiritualidad del seguimiento de Cristo, en el ministerio de la caridad, prolonga el misterio de la Encarnación en el compromiso concreto frente a la pobreza, y nos abre a la perseverancia viva del Espíritu. Esta espiritualidad es un proceso de integración creciente del amor a Dios y al prójimo que se traduce en un estilo de vida. Más que una acción, la caridad es un modo de existencia (la gratuidad, la misión, el compartir, la pobreza evangélica, la cercanía, la autenticidad…).